Microsoft reveló los primeros detalles sobre su nuevo hardware para el Xbox de próxima generación en su conferencia de prensa de este E3 2019, en donde aparte de mostrar algunas especificaciones técnicas, han anunciado que estará saliendo a finales del año 2020.
La consola lleva de nombre código Project Scarlett y contará con una CPU de personalizada basada en la arquitectura Zen 2 y Radeon RDNA de AMD, y promete que esta consola sea cuatro veces más poderosa que la Xbox One X. Microsoft también está usando una rapidísima RAM GDDR6, que afirma que marcará “el comienzo de una resolución y frame rates nunca antes vistos“.
Esta nueva consola admitirá juegos de resoluciones hasta 8K, 120 fps, ray-tracing y soporte para refresh rate variable. Microsoft también estará usando un SSD en el Proyecto Scarlett. “Hemos creado una nueva generación de SSD. Estamos usando el SSD como RAM virtual”, dice un portavoz de Xbox en el video de presentación. Esto debería aumentar el rendimiento en 40 veces sobre la generación actual de acuerdo con Microsoft, y eso significará que los juegos se cargan mucho más rápido.
